12/16/2010

A bailar a bailar.




A bailar a bailar.

Estos días pienso en el dicho “Después de la tempestad viene la calma“. A veces, ante situaciones límite, nos (me) alteramos, perdemos la cabeza, el sueño, la razón y algunos hasta el sentido del humor. Yo muchas veces. Parezco otro. Me repongo rápido.

Intento que esa presión que sufrimos, o que nos ponemos algunos, ante la adversidad no me pueda. Lo siento, me vence. ¿Cómo lo hacen los demás? ¿Cómo lo superan? Llorando, durmiendo, bebiendo, practicando…. deportes de riesgo. Trasplantes de corazón. Sin duda, están tocados, están de suerte o la buscan.

Quiero una escalera y subir; subir y ver el vaso lleno, medio lleno o casi lleno. Quiero dejar de ser un sentimental. ¡ojo¡ no dejaré de escuchar a Julio Iglesias. Un lágrimas. Quiero ser hielo, telón de acero. Desconfiado y distante siempre. Alguna vez lo he intentado. No lo hago mal. No estoy a gusto, no me va, incluso creo que siempre lo haces con el más débil y eso, creo que no esta bien.

Así que lo mejor, fuerza, positividad, distracción, mucha conversación y rodearte de lunares, volantes y el mundo por montera. A bailar a bailar. Que es lo que toca. Y campana sobre campana.

Hoy después de ducharme, y de no pegar ojo es lo que hago. Verme mucho mejor, incluso atractivo y buen día. Ya estoy disfrutando de la calma, pensando en el fin de semana en mi casa de la Ribera Alta de la Príncipe de Asturias. No, no me he cambiado de casa, pongo adjetivos. Me olvido de los asuntos más incómodos, diarios y de trabajo, como los presupuestos, los pdf, los retrasos de libros y me concentro en temas algo más frívolos. He pensado en darle el sitio oportuno, si lo encuentro a la negatividad. No quiero volver a llevarla puesta. No quiero ese escenario desolador. Estoy disfrutando ya con la carta a SS MM Los Reyes, con su vista, con su presentes, con las reuniones queridas. Con Valmoro y Mantel Blanco y sus efectos relajantes me dan equilibrio. ¿Irán con receta?

Aprender de las dificultades nos ayuda a caminar hacia el gozo, el disfrute. Hacia la familia. Muchas piedras encontramos que nos hacen detenernos en el camino. Paramos, Nos limpiamos los zapatos (es lo más importante de cualquier traje) y tocamos trompetas que nos abren camino como en nuestra Semana Santa. Avanzamos y crecemos, hacemos callo.

En mi traje, hoy llevo otra capa, de frivolidad. Estoy encantado. Tengo la oportunidad de desarrollarme laboralmente (tengo trabajo), paseo por los alrededores de Madrid, con una puesta en escena fantástica, el arte inunda la calle, muero por lo alternativo, es lo más, gratuito y Vintage no tengo que pagar ticket (Pan Bendito - Carabanchel), Soy un luchador de sueños, sigo soñando con…. todo aquello que me gusta y que pienso que con mi billete de lotería lo tengo a mi alcance. Y dar y amar es siempre mejor que, que te den.


Sergio, GRACIAS por la foto y por todo

2 comentarios:

Ana Pedrero dijo...

¡¡¡Cómo me gusta leerte así, mi querido 'hermano'!!!

Sabes que te quiero y que siempre bailaré contigo, con Olga y con tu prole, porque son tus prolongaciones naturales. Mil besos, Chichi.

p.d. Lo de la Ribera Alta de la Príncipe de Asturias me ha encantado, pol Dio. :)))

Josué dijo...

Estoy Jarto ( del verbo hasta los guevis) de tristeza, quiero bailar, soñar y a mal tiempo mi cara lozana y zamorana para disfrutar con mis amigos. bsss chichi (Del verbo conejo)