Sí. Días pasados comenzó INTERGIFT, el
pistoletazo de salida para la nueva temporada social, junto con la foto de su
Alteza Real la Infanta Leonor entrando en el colegio. ¡Comienza el nuevo curso
escolar! (algo que tanto ansiamos, no sé si SS.AA.RR. los Príncipes de Asturias
opinan lo mismo). Por suerte, el calor se encoge y nos da un respiro a los
cortesanos. Quiero hacer y deshacer, emprender y recoger. Hay tanto humo en el
ambiente que a veces nos impide ver el camino. Pero es ahora el “time” de hacer
esos planes triunfalistas, de conquistar… Estamos plenamente inmersos en la
vida. Ni hablar de la cara de “madero cabreado”.
He resistido los días soleados con un buen
sombrero de estilo de Panamá, sombrero guapo de borde curvado. Su uso comenzó
en mayo (todo es costumbre, tradición y tiempos) y termina ¡¡¡ ya!!!, en
septiembre. También termina mi descanso estival, los viajes, algunas cenas al
aire libre y las anécdotas propias de la temporada; cómo convertirse en espectador de una conversación en la que
no faltan la ironía y el sentido del humor, ¡es fantástico! También las
experiencias mundanas y miserables; alguna vez que mis pies y manos se
hincharon —la retención de líquidos puede con todo—… Cosas del verano que ya
llegó a su fin.
Creo que por fin diremos adiós al cierre
de tiendas, negocios… ya no más. Las bases de la recuperación dicen que se han
puesto, aunque duelen y crujen. Tiemblan y cimbrean los cimientos de épocas más
opulentas, alimentadas por generosas subvenciones; eso es ya historia. Ya no da
para más. Septiembre nos dice que los ladrones se tienen que ir, que no los
queremos, ni pintados por Cecilia Giménez y su singular restauración. Es hora
de poner buena cara y de mantener los ojos abiertos. Una buena imagen puede
ayudarte a conseguir los objetivos comerciales o de éxito: ¡Y yo los
deseoooooo! Quizá, por eso, José María Ruiz Mateos podría pasar por “Sálvame”
(supongo que su versión DELUXE) para llevar flanes Dhul a “La Benito” (ya que
Belén ha “petao") y a sus compis. Más le hubiera valido repartir
dividendos y dejar de lavar su estirada y recauchutada cara por ninguna parte.
Debemos oponernos a su presencia en TV. Apagón. ¡Pájaro!
Estamos a finales de septiembre, he despertado
divinamente. He conseguido dormir profundamente, después de mucho tiempo. Me
siento ansioso y repleto de energía. Sin tomar nada. Tengo ganas de comerme el
mundo y no alimentarme de nada (ni sobres, ni barritas…). Es mi particular
manera de ver el mundo ¡Euforia! . Creo que debería organizar una fiesta de
despedida del verano. Una cena fabulosa para todos nosotros y días de gloria.
Ni hablar de mantener un perfil bajo, que te dan por todo.
A veces no sé quién soy,
si Mr. Jekyll o Mr. Hide. Hoy corresponde estar preparado, con optimismo y
buena cara frente a todo lo que venga. Ya tengo en mis manos el trébol mágico
de las cuatro hojas: el trébol de la suerte ilimitada a quien lo posee.
¡¡¡Búscalo!!! En algún lugar de nuestra cabeza lo encontraremos. Un rato de
suerte nos dará.
Me encantan los contrastes, las luces y las sombras que
puede albergar mi cabeza. Todo se logra resolver muy bien con mano hábil y el
ojo iluminado. Que yo no tengo. Renovarse es la clave siempre y atreverse una
virtud. Tenía toda clase de tonterías filosóficas corriendo por mi cabeza para
compartir con vosotros. Hoy entré en una mañana gloriosa que espero que dure…
La parte más difícil de reajustarse al "mundo real" está en uno
mismo: tomándome más en serio y con buena cara, todo saldrá mucho mejor —“Eso
es”— elige qué ropa te pondrás: estás diseñando la imagen que deseas transmitir
y esto determinará tu estilo y tu estado de ánimo. Yo azul, que me da
tranquilidad y seguridad. Hoy no toca combinaciones de colores inesperados y
raros. Quiero templanza y fuerza. Intento estar fuerte y servicial por fuera;
por dentro necesito a veces menos admiración y más ternura con toques de cariño
(estos me los suelen dar en casa)... y un ápice de pasión.
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